Lo denunció el jefe de Gabinete de la municipalidad de Ushuaia, Sebastián Iriarte, luego del operativo de desarme y desalojo que se llevó adelante en la zona de Bosque del Faldeo.
Más de 50 familias fueron desalojadas de una zona cercana al barrio Ecológico, en el Bosque del Faldeo.
Minutos después del masivo desalojo, que arrojara como resultado a un policía herido luego de algunas refriegas, el jefe de Gabinete de la municipalidad de Ushuaia, Sebastián Iriarte, dialogó con Radio Nacional Ushuaia y dijo que en primer lugar se hizo un relevamiento como municipio:
“Cuando la cosa se tornó violenta necesitamos el acompañamiento de la policía. Desarmamos 4 o 5 ocupaciones, pero en seguida empezó a acumularse gente. Hubo 100 trabajadores municipales, 50 efectivos policiales y fuerzas especiales”, detalló.
“Aprovechando el escenario nacional, esta efervescencia hace que algunos piensen que pueden tomar estas acciones y que el poder de Estado se ve disminuido por esta condición social. Una cosa es quejarse y otra es usurpar espacios que no están permitidos”, consideró Iriarte.
Asimismo, el jefe de Gabinete aseguró que continúan regularizando barrios que se emplazaron hace más de 20 años, “producto de no discutir los problemas y esconderlos tuvimos dos ciudades: una arriba y otra abajo”, señaló.
“Esto ha cambiado, producto de la mirada del Intendente. Eso no quiere decir que no nos pongamos firmes cuando corresponda”, indicó Iriarte.
Además, recordó que días atrás vecinos de la zona alertaron de depósitos materiales, mientras gente merodeaba y buscaba lugares para asentarse: “Inmediatamente nos pusimos a trabajar para hacer las averiguaciones necesarias, a ver quiénes eran las personas que llevaban adelante esas medidas”.
“Cuando entendimos que no podíamos llegar a un acuerdo, empezamos las reuniones con la policía y coordinamos un desalojo de todo el sector”, agregó.
Iriarte apuntó a que en el lugar había “más viviendas que grupos familiares”, pero reconoció que prestaron “asistencia a 2 familias de las que estaban ahí. Eran 50 construcciones precarias y mucha gente que reservaba el lugar. Algunos individuos especulan en función del lugar que quieren ocupar”.
“Hacíamos la cuenta, – continuó diciendo Iriarte-, y algunas camionetas con las que se llevaban los materiales valían como para pagar 5 años de alquiler. Nosotros decíamos que hay que pasar una necesidad muy complicada para esa determinación. Costó, pero pudimos desarmar todo el lugar”.
El jefe de Gabinete municipal fue consultado respecto a cómo continuará esto y aseguró que investigarán junto a la policía, para compartir “información que nos permita estar alerta y atentos a cualquier eventualidad. Les pedimos a los vecinos que recurran a los medios de comunicación de la municipalidad. Sin la policía no podríamos haber hecho esto, porque a la fuerza pública la maneja la provincia”.