En el día de la Memoria por la verdad y la justicia, el Concejal de Río Grande por el PJ, Hugo Martínez, habló acerca de la fecha y señaló que la dictadura fue el producto de la implementación de políticas económicas destinadas a expoliar a los pueblos latinoamericanos. Además, celebro el alta médica de la concejala Cintia Susñar quien fuera hospitalizada hace algunas semanas por un cuadro vascular.
Respecto de la salud de la edil del partido Ciudadanos señaló que “todos estamos pendientes de esta situación, es una compañera, una amiga, una vecina de nuestra ciudad, estamos constantemente en contacto por nuestra tarea así que demás está decir que estamos expectantes por la salud de Cintia y le deseamos una pronta recuperación y, por supuesto, nuestro acompañamiento a toda su familia».
En lo que refiere a la conmemoración de los 46 años de la última dictadura militar, el concejal expresó en principio su compromiso con la democracia y su repudio contra todo aquello que atenta con la dignidad, con la soberanía y con los derechos humanos y agregó “siempre que se habla del golpe de Estado del 76, siento gran dolor por todos mis compañeros y amigos que padecieron esas circunstancias dolorosas, las desapariciones, pero siempre trato de pensar el origen de todo eso, porque el golpe de Estado fue una consecuencia de algo mucho más profundo, de algo mucho más serio” al tiempo que explicó que “las riquezas del mundo cada vez van quedando en menos manos. En aquellos años de violencia la forma más fácil era a través de los golpes de Estado, quedarse con los gobiernos para manejar fácilmente la extracción de esas riquezas, entonces los golpes de Estado se daban sistemáticamente en toda Latinoamérica por que era el método de acción del poder imperante, luego fueron actualizándose esos métodos pero siempre hubo un punto que permanece desde 1820 a la fecha que es la deuda externa”.
En ese sentido, dijo mediante la deuda se busca siempre presionar a las gobiernos locales para que no implementen políticas de redistribución de la riqueza, cuyo efecto es el desarrollo social y el fortalecimiento político de las naciones que tornan más difícil el acceso de las multinacionales a la extracción de los recursos de los países.
Paralelamente, dijo que mediante estos gobiernos de facto generalmente se robustece al sector financiero “que no produce riqueza y concentra los ingresos cada vez en menos manos, en detrimento de la sociedad en general”.
“Lo que padecimos entre el 76 y el 83 no tuvo su origen en el 73 ni su fin en el 83, son políticas y sistemas que se vienen manejando y pergeñando desde otros lugares. La dictadura militar es una pata más de todo un sistema que trabajaba para la expoliación de toda Latinoamérica” dijo y agregó “hoy no estamos tan lejos de volver a vivir estas circunstancias, no desde el punto de vista de la violencia ni de los golpes militares porque ya no se dan esas metodologías ni están esas condiciones dadas pero si en la misma política de división del campo popular para que el poder permanente, que es más poderoso que un Gobierno, pueda seguir realizando su política de acumulación de riqueza en manos de las minorías”.
Martínez dijo que la violencia de la dictadura es una consecuencia de esas políticas y sostuvo que de estas cuestiones no se habla, señalando que se enturbia así la apreciación de los elementos de fondo.