La Ministra de Salud de Tierra del Fuego habló sobre la actualidad de la cartera y afirmó que la crisis económica nacional golpea fuerte a la salud pública. Además, comentó la cuestión de los salarios y si bien consideró válido el reclamo salarial, afirmó que no es una cuestión de voluntades sino de las posibilidades económicas que habilita el contexto.
La Ministra de Salud de la Provincia, Judith Di Giglio, habló por FM La Isla acerca de la crisis de profesionales de la salud, tras las manifestaciones de integrantes del gremio SIPROSA en redes sociales por la situación salarial. En Ese sentido, dijo que la cuestión salarial es atendible y aclaró que el sindicato de profesionales no es parte de la paritaria de la salud debido a que dicha organización no ejerce representación en esa instancia.
Tras reconocer que hay un atraso salarial que debe ser abordado y que sin dudas deviene general ante la desastrosa gestión económica de Javier Milei, la ministra llamó a considerar algunos factores que desmejoran las condiciones de los profesionales, entre ellos el alquiles de vivienda en Ushuaia, que hace tiempo ha dejado de responder a toda lógica, y señaló que “estamos buscando herramientas desde muchos ámbitos, uno es el salarial”, al tiempo que adelantó que habrá mejoras salariales para toda la salud pública y sumó la posibilidad de generar planes de vivienda mediante el IPV, como otro de los factores para sostener la oferta de profesionales en Tierra del Fuego. “El 6% de las viviendas que se entregan van para profesionales de la salud”, detalló y aclaró que esto siempre dando cumplimiento a los requisitos para ser parte del listado del IPV.
Paralelamente, di Giglio sumó a la encrucijada que atraviesa la salud fueguina el impacto de los nuevos demandantes de la salud pública puesto que, ante la crisis, muchísimos usuarios se han abandonado la salud privada para atenderse en nosocomios públicos, agravando la situación económica de los hospitales. “Los fondos son siempre los mismos, así que por supuesto que es una situación difícil, como la que estamos viviendo todos los ciudadanos”, dijo la ministra y agregó, “nosotros con diálogo y con la posibilidad de poder pagar los salarios y de dar aumentos salariales, que están existiendo y que van a seguir, pero por supuesto que para la gente en general no es lo que desean ni lo suficiente”.
En ese orden de cosas, sostuvo que va a ser muy difícil mantener la calidad de las prestaciones en este contexto, considerando que los insumos de la salud se han encarecido fuertemente y señaló que cuando todos los sectores del sistema de salud están en crisis, las prepagas, obras sociales y las clínicas privadas, es la salud pública la que absorbe la demanda, lo que provoca que la misma se sature y vea, además, disminuido sus ingresos por las caídas en las obras sociales y prepagas.
“Las personas se trasladan al sector público que además ve disminuido su ingreso de los terceros pagadores. Por un lado, aumentan los costos y por otro disminuyen los ingresos”, afirmó, al tiempo que aseguró que el Gobierno de la Provincia hace muchos esfuerzos en otros sectores públicos para sostener la salud y la educación. Un punto aparte señalado por la ministra, es el retiro del apoyo de Nación en los tratamientos de alto costo como los oncológicos. “Lo que notamos es directamente una ausencia del Ministerio de Salud de la Nación”, dijo.
En esa línea se refirió al corte de servicios a beneficiarios de OSEF en los hospitales Británico e Italiano de la Capital Federal. Al respecto, recordó que la prepagas aumentaron un 300% sus cuotas mensuales mientras que la obra social de la Provincia ve sus ingresos atados al destino de los salarios provinciales que no han alcanzado ni de cerca tales cifras, motivo por el cual el desfinanciamiento de las obras sociales patente, sin hilar fino en la ya conocida crisis que atraviesa la entidad desde siempre. Vale señalar que hoy la OSEF registra deudas con los propios hospitales públicos de Tierra del Fuego.
Finalmente, la Ministra afirmó que se van a mantener las obras en hospitales públicos que dependan de fondos provinciales.