Denuncia por mala praxis en el HRRG: “Era una muerte absolutamente evitable”

El Dr. Francisco “Paco” Giménez, abogado querellante de los padres de Kevin, el niño de 7 años fallecido en el Hospital Regional de Río Grande, habló sobre la denuncia presentada y dio cuenta de la reconstrucción de los hechos de este trágico acontecimiento.   

Se presentaron como querellantes los padres de Kevin el niño de 7 años fallecido en el Hospital Regional de Río Grande, patrocinados por el abogado Francisco “Paco” Giménez, en la denuncia a tres profesionales médicos que lo asistieron desde el 19 de mayo, hasta que fallecía 4 días después con diagnósticos erróneos.

Al respecto, el abogado de la familia denunció: “Esta era una muerte absolutamente evitable, hay una madre a la que han quitado su niño de siete años. Ya se presentó el reclamo es penal para que se investigue la causal de muerte, qué falló y quienes son los responsables”.

El letrado indicó que ya se tuvo acceso a la historia clínica y resta que el Poder Judicial ordene un secuestro, “hay una ecografía que no quisieron entregar a los padres, estamos tratando de buscarla ya que revela el estado de salud de Kevin 10 horas antes de su muerte”.

También se solicitó la imputación de tres profesionales, la cual será evaluada por el juez para ver si la merecen o faltan elementos.

“Pocas veces vi un caso como este”, sentenció Giménez.

Los hechos:

Los hechos se reconstruyen de la siguiente manera: El 19 de mayo del corriente año el padre concurre con Kevin a la guardia del Hospital porque había presentado un malestar generalizado, pero particularmente en el cuello y la zona del cachete izquierdo.

Es atendido por una médica pediátrica quien le revisa la boca y les dice que saquen un turno con odontología, lo mandan para su casa sin laboratorios ni hisopado de fauces, práctica común cuando los niños presentan malestar en la garganta.

El 21 de mayo el niño desmejoró notablemente, por lo que la familia concurre nuevamente al Hospital. Presenta fiebre alta, casi 39°, contracturas en el cuello y la zona del cachete, además de diarreas y vómitos, sarpullidos y la lengua blanca. La médica lo revisa y diagnostica torticolis, recomienda que lo froten con un medicamento y nuevamente lo envían a su casa.

“El 22 de mayo es recibido nuevamente por otro pediatra y un cirujano infantil, quienes no hacen nada. La familia reclama y los médicos maltratan a la madre”, manifestó “Paco” Giménez.

 Posteriormente tratan de sacarle radiografías al niño, pero no podían trasladarlo por el dolor y ya se había empezado a hinchar de manera alarmante, “sin tomar recaudos de que podía tratarse de una infección, entonces lo internan en pediatría”.

Alrededor de las 01:00 horas un médico hace análisis para determinar si hay una infección y además se hace una ecografía, a las 15:00 horas llega el resultado y dicen que está infectado con estreptococo.

“Los médicos de terapia intensiva hacen todo lo profesionalmente posible para salvarlo, lo medican contra la bacteria para combatirla, pero a las 16:00 horas fallece”, añadió.

Por último, el abogado de la familia resaltó: “Es para destacar que ante la novedad de la posible exhumación, la Municipalidad de Río Grande puso a disposición todos los servicios de salud que disponen para cuidar a los padres en ese momento”, finalizó.

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