La exmandataria encabezó el encuentro del Consejo Nacional del Partido Justicialista, donde abordó el escándalo del criptogate, cuestionó al Presidente y marcó distancias con Axel Kicillof. Además, se definieron nuevas secretarías y se lanzaron iniciativas para fortalecer la estructura partidaria.
En un contexto marcado por la polémica del criptogate, que involucra directamente al presidente Javier Milei, Cristina Fernández de Kirchner (CFK) condujo este lunes su primera reunión como presidenta del Consejo Nacional del Partido Justicialista (PJ). El encuentro, celebrado en la sede porteña del partido ubicada en la calle Matheu, comenzó alrededor de las 19 horas y contó con la presencia de destacados dirigentes peronistas. La fecha no fue casual: coincidió con el aniversario del primer triunfo electoral de Juan Domingo Perón en 1946.
Durante la reunión, CFK se refirió al escándalo de la criptomoneda $LIBRA, en el que Milei está implicado, y exigió a los legisladores peronistas que insistan en la investigación del caso. “Sin su participación no hubiera existido”, afirmó la exmandataria, en referencia al rol del Presidente en la presunta estafa. Además, destacó los constantes cambios de postura de Milei para intentar defenderse, calificándolos de “contradictorios” y “sorprendentes”. En particular, mencionó su giro en la visión sobre los monopolios, luego de que el Gobierno emitiera un comunicado crítico tras la compra de Telefónica por parte del Grupo Clarín.
Uno de los temas que generó mayor repercusión fue el silencio absoluto sobre el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien el sábado pasado lanzó su propio espacio político, “Movimiento Derecho al Futuro”. Aunque no se abordó oficialmente, varios dirigentes expresaron en privado que la decisión de Kicillof fue “inoportuna”, “desubicada” y “divisiva”. Además, ninguna de las secretarías del PJ fue asignada a figuras cercanas al gobernador bonaerense, lo que reforzó la percepción de distanciamiento.
Un encuentro con fuertes definiciones políticas
La reunión, que se extendió por casi dos horas, contó con la participación de importantes figuras del peronismo, como José Mayans, titular del bloque de senadores de Unión por la Patria (UxP); la senadora Lucía Corpacci; el diputado Germán Martínez; la intendenta de Moreno, Mariel Fernández; y el secretario general de SMATA, Ricardo Pignanelli, entre otros. También se designaron a los responsables de las distintas secretarías del partido, entre ellos Teresa García (Secretaria General), José Neder (Interior), Mayra Mendoza (Organización) y Anabel Fernández Sagasti (Asuntos Legales y Constitucionales).
En su discurso de cierre, CFK se refirió al reciente viaje de Milei a Washington, donde el Presidente intentó minimizar su participación en el caso de la criptomoneda $LIBRA. La exmandataria subrayó los “cambios de posición” del mandatario y criticó la actitud del senador radical Eduardo Vischi, quien presentó un proyecto para investigar el caso pero luego votó en contra. “Eso no se justifica con presiones”, afirmó, en alusión a la influencia del gobernador de Corrientes.
Además, CFK pidió a las secretarías de Innovación Tecnológica, Inteligencia Artificial, Criptografía y Ciberseguridad y de Asuntos Legales y Constitucionales que elaboren informes sobre el caso $LIBRA. “Sin su participación no hubiera existido”, reiteró, en referencia a la presunta implicación de Milei en la estafa.
Tensiones internas y proyecciones a futuro
El lanzamiento del espacio político de Kicillof generó malestar entre los dirigentes peronistas. “Tuvo falta de timing”, opinó un referente al ingresar a la reunión, mientras que otro señaló que la iniciativa “solo genera división” y no suma votos ni dirigentes. Por su parte, el senador Eduardo “Wado” de Pedro, quien no fue designado en ninguna secretaría, publicó en sus redes sociales un mensaje de apoyo a CFK: “Con su conducción, el peronismo se ordena y avanza. El desafío es enorme, pero también la responsabilidad: reconstruir un proyecto de país con justicia social”.
Entre las decisiones adoptadas en el encuentro, se destacan la prórroga de la intervención del PJ en Jujuy y la intervención en los distritos de Salta y Misiones. Además, se presentó un Proyecto de Ley de Afiliación Digital y se creó el Instituto Modelo Argentino, Pensamiento y Acción para la Patria, un nuevo ámbito encargado del eje programático del partido. También se propuso la creación de una “universidad justicialista”, destinada a la formación de cuadros políticos, sindicales y de gestión.
Finalmente, CFK convocó a los militantes a participar en cadenas de oración y manifestaciones por la salud del Papa Francisco, en un gesto que busca unir al partido en torno a un símbolo de relevancia nacional e internacional.
La reunión marcó el inicio de una nueva etapa para el PJ, con CFK al frente y en un año electoral clave. Sin embargo, las tensiones internas y los desafíos políticos parecen ser solo el comienzo de un camino lleno de incertidumbres para el peronismo.