El presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, celebró un logro sin precedentes para Sudamérica durante el Congreso Extraordinario de la FIFA.
En un anuncio que marcó un hito en la historia del fútbol, Claudio “Chiqui” Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), confirmó que el Mundial 2030 comenzará con partidos inaugurales en Argentina, Uruguay y Paraguay. Este acontecimiento, que conmemorará el centenario de la primera Copa del Mundo organizada en Montevideo en 1930, también tendrá como sedes principales a España, Portugal y Marruecos, quienes albergarán el grueso de la competencia, incluida la gran final.
El anuncio fue realizado durante el Congreso Extraordinario de la FIFA, presidido por Gianni Infantino, en un evento cargado de simbolismo y trascendencia histórica. Tapia destacó la relevancia del acuerdo alcanzado y agradeció el apoyo de los congresistas y de Alejandro Domínguez, titular de la Conmebol, por liderar las gestiones que hicieron posible este logro.
“Hoy es un día histórico para el fútbol mundial y sudamericano. Como lo mencioné durante los Juegos Olímpicos, Alejandro Domínguez será recordado como el presidente que logró que nuestra región volviera a tener un Mundial”, expresó Tapia emocionado. Además, subrayó el carácter simbólico de este evento al señalar: “Va a ser el primer Mundial de la democracia en nuestro país, y todos saben por qué lo digo”.
Un Mundial compartido entre continentes
El Mundial 2030 será el primero en la historia en ser organizado por seis países de tres continentes. Sin embargo, Sudamérica solo albergará los partidos inaugurales, mientras que el resto del torneo se disputará en Europa y África. España, Portugal y Marruecos serán los encargados de recibir el grueso de los encuentros y la esperada final.
Durante una conferencia de prensa conjunta en octubre de 2023, Tapia y Domínguez explicaron los motivos de esta decisión. Tapia enfatizó que “era inviable conseguir los votos y el presupuesto necesarios para que Sudamérica organizara todo el Mundial”. No obstante, celebró que “fue una gran noticia conseguir estos partidos sin necesidad de invertir en infraestructura, ya que los estadios están listos”.
Por su parte, Domínguez destacó la complejidad y los costos que implica organizar un evento de tal magnitud: “Requiere una inversión gigantesca. Hubiéramos estado imposibilitados de llevarlo a cabo por completo en nuestra región. Este esquema nos permite ser parte de la historia”. Además, resaltó el valor simbólico del homenaje al primer Mundial, indicando que “un torneo de 100 años debía recordar sus orígenes y estar a la altura de las circunstancias”.
Reacciones y expectativas
El anuncio generó gran entusiasmo en los países anfitriones sudamericanos. Tanto en Argentina como en Uruguay y Paraguay, los hinchas celebraron la posibilidad de vivir el inicio del torneo más importante del fútbol en sus territorios. Al mismo tiempo, los representantes de la Conmebol y la FIFA resaltaron la cooperación entre continentes como un ejemplo de unidad y colaboración global.
Con esta decisión, el Mundial 2030 no solo será un homenaje a un siglo de historia futbolística, sino también un evento que buscará marcar un precedente en la organización conjunta de torneos deportivos de esta magnitud. La cuenta regresiva para este histórico campeonato ya comenzó, y millones de aficionados esperan con ansias lo que promete ser una celebración inolvidable del deporte rey.
