El equipo de Fernando Gago enfrenta una prueba de fuego tras la eliminación en la Copa Libertadores, mientras un escándalo nocturno de dos jugadores genera malestar entre los hinchas.
Boca Juniors continúa su preparación en el predio de Ezeiza con el firme objetivo de superar la profunda crisis futbolística que se desencadenó tras su prematura eliminación en la Copa Libertadores frente a Alianza Lima. El entrenador Fernando Gago está consciente de que su continuidad al frente del equipo pende de un hilo, y el encuentro del próximo viernes contra Central Córdoba se presenta como una nueva y decisiva prueba para su futuro.
La meta en el club ha cambiado radicalmente: ahora, la única salida aceptable es consagrarse campeón. Tras un ajustado triunfo ante Rosario Central en La Bombonera, el equipo necesita demostrar fortaleza como visitante, un aspecto que ha sido su talón de Aquiles en los últimos tiempos.
En este contexto, Gago contará con la vuelta del defensor Rodrigo Battaglia, quien se recuperó de los golpes sufridos en el partido contra Alianza Lima. No obstante, el mediocampista ofensivo Alan Velasco continúa entrenando de manera diferenciada debido a un esguince en el tobillo, lo que dificulta su presencia en el próximo partido. Por otro lado, Tomás Belmonte, quien arrastra una molestia en el gemelo, incrementará la intensidad de sus entrenamientos en los próximos días y podría reaparecer desde el banco de suplentes.
Sin embargo, más allá de los desafíos deportivos, un nuevo escándalo ha sacudido al club. En las últimas horas, se viralizó un video en el que se observa a dos jugadores de la plantilla, Marcos Rojo y Cristian Lema, disfrutando de una salida nocturna en una discoteca de Buenos Aires, apenas unos días después de la dolorosa eliminación en la Copa Libertadores.
Las imágenes han generado indignación entre los hinchas, quienes cuestionaron el compromiso de los futbolistas en un momento tan delicado para el equipo. Las redes sociales se inundaron de críticas, y las cuentas fanáticas del “Xeneize” no tardaron en expresar su descontento, señalando la falta de profesionalismo de ambos jugadores. Además, trascendió que Rojo y Lema no llegaron en las mejores condiciones al entrenamiento del martes, lo que avivó aún más el enojo de la hinchada.
Con este clima de tensión, Boca Juniors se alista para viajar a Santiago del Estero, donde enfrentará a Central Córdoba el viernes en un partido crucial para el futuro de Gago y del equipo. El “Xeneize” está obligado a sumar los tres puntos para aliviar la presión y evitar que la crisis siga escalando en un momento clave de la temporada. La paciencia de los hinchas se agota, y solo un triunfo contundente podría calmar los ánimos en este escenario turbulento.