El comisario Barrios Kogan, de la Policia Provincial, señaló que hay un incremento de la delincuencia debido a la situación socioeconómica. La policía provincial enfrenta una creciente demanda de seguridad, con aumento de robos en zonas de nuevas construcciones y mayor presión sobre el servicio de emergencias. La necesidad de más efectivos y equipamiento es crítica, según el subjefe de la fuerza.
El comisario Oscar Alfredo Barrios Kogan, subjefe de la Policía de la Provincia, advirtió sobre el complicado contexto social que ha provocado un aumento en los delitos contra la propiedad privada. “Estas cuestiones socioeconómicas son las que incrementan los delitos”, señaló. Ante esta situación, la utilización de tobilleras electrónicas ha aumentado, y se mantiene un monitoreo constante del 911 no solo en Río Grande, sino en toda la provincia.
Barrios Kogan subrayó que la demanda de servicios policiales ha sido “estrepitosa” a lo largo de la semana. El comisario destacó la necesidad urgente de sumar al menos 500 efectivos para cubrir las crecientes exigencias, especialmente en las áreas operativas como los patrullajes callejeros.
En cuanto a las zonas más afectadas, afirmó que “cada jurisdicción tiene su nivel”, mencionando a la Margen Sur y Chacra como áreas donde se ha incrementado el robo de materiales, especialmente en barrios nuevos y zonas en construcción. “En la jurisdicción de la tercera y la Margen Sur se pueden considerar las zonas más calientes”, agregó, mientras que en San Martín Norte y CGT Nuevo hay presencia policial las 24 horas.
Para tratar de mitigar los delitos, se han instalado dos cabinas de vigilancia equipadas con cámaras que funcionan ininterrumpidamente. “Siempre es mejor prevenir”, afirmó Barrios Kogan, reconociendo que, a diferencia de años anteriores, la identificación de los delincuentes se ha vuelto más complicada debido al crecimiento poblacional.
El robo de alimentos en supermercados ha sido otra de las preocupaciones crecientes, impulsando a la policía a intensificar el trabajo en flagrancia. Además, se mantienen reuniones constantes con grupos de vecinos y una estrecha colaboración con la justicia.
La comisaría de género, por su parte, ha registrado un incremento en las denuncias de violencia intrafamiliar, reflejando una situación que afecta no solo a la ciudad, sino al país entero. Según el comisario, la policía ha reforzado su rol de contención en estos casos, con 15 consignas solo en Río Grande y un aumento de llamadas al 911 durante los fines de semana.
Barrios Kogan también se refirió al equipamiento, destacando que en Río Grande hay actualmente alrededor de 62 cámaras de monitoreo, algunas ubicadas en puntos clave como José Menéndez. Asimismo, se están gestionando más móviles, cámaras y nuevos centros de monitoreo para reforzar la seguridad en toda la provincia.