En declaraciones a FM La Isla, el presidente de AFARTE, Federico Hellemayer, se refirió a la prórroga del subrégimen industrial. “Sería un error ver al subrégimen como un privilegio y como un mecanismo temporario”, expresó.
“El anuncio político del lunes fue largamente esperado y en ese sentido hay que estar muy contentos”, inicio el líder empresario y señaló que no se trata de una prorroga lisa y llana sino que se introduce la innovación de la creación del fondo para la diversificación de la matriz productiva fueguina, a partir de los aportes de las empresas ligadas al subrégimen.
En ese sentido, señaló que este fondo se constituye como instrumento para canalizar el proceso de diversificación y estará sujeto a la las actividades que tanto el Gobierno nacional como provincial consideren plausibles para la matriz productiva fueguina. Al respecto, Hellemayer sostuvo que este mecanismo ordena la cuestión del sector privado en la infraestructura pública y afirmó que es un nuevo componente de la estructura de costos de las empresas.
“Este no es un acuerdo, es una norma”, dijo el empresario y señaló que si bien el Gobierno de la Nación ha recogido las experiencias y pretensiones de los distintos sectores, se trata de una decisión política y o de un acuerdo de partes.
Paralelamente, señaló que “sería un error ver al subrégimen con un privilegio y como un mecanismo temporario” y agregó, “la visión interesante de la prórroga actual es que, a esta actividad que yo la tengo promocionada le voy a pedir un esfuerzo para que me permita desarrollar actividad que no está promocionada y que me permita aprovechar recursos naturales”.
“Nosotros hemos hecho bastantes estudios económicos y estamos convencidos de que,más allá de explicaciones que se han podido dar en el pasado como por ejemplo el sobrecosto logístico y demás cuestiones, hoy el subrégimen de alguna manera coadyuva para que la industria que está establecida en Tierra del Fuego provea al mercado interno productos electrónicos a precios asequibles, precios que son muy competitivos con los precios de Brasil, con algunos precios de Chile que tiene un modelo distinto, un modelo de importación, y de esa manera una gran parte del beneficio fiscal se traslada en un menor precio al consumidor. Esta es una mirada que nos permite acercarnos a una noción mucho más integrada del subrégimen y no ya como un privilegio para algunas pocas empresas y tampoco como algo que tiene que ser llamado a ser temporario”, explicó.
En tal sentido afirmó, “creemos que es viable un modelo con determinado grado de industrialización que genere mano de obra intensiva en un lugar al que le viene muy bien esa dinámica demográfica y que al mismo tiempo sea lo más competitivo posible para que una parte significativa de ese beneficio se traslade al consumidor”.
En cuanto a las expectativas inmediatas del sector, Hellemayer afirmó que al margen de la obtención de la prórroga no s encontramos en un escenario económico de crisis. “Los números van a ser mejores que los de 2020, van a estar un poco en línea con el 2019 que fue un año muy muy malo, tal vez un poquito por arriba, creo que hay que seguir pisando sobre firme”.
“Esperemos que el año que viene que es un año de mundial, para una categoría nuestra como son los televisores haya un impulso”, agregó, al tiempo que señaló que “esta complicado el consumo en la Argentina, tenemos una inflación alta, cruje el poder adquisitivo”.