La ex presidenta Cristina Kirchner no asistirá al fallo de la Cámara de Casación sobre la causa Vialidad, pero recibirá apoyo político y social mientras se prepara para la apelación ante la Corte Suprema. El gobernador Axel Kicillof y dirigentes del PJ se suman al respaldo político frente a lo que consideran un caso de persecución judicial.
Cristina Fernández de Kirchner se reunirá este martes con la nueva conducción del Partido Justicialista (PJ), mientras se intensifica el respaldo político hacia su figura. A pesar de la convocatoria de la Cámara de Casación para anunciar el fallo sobre la causa Vialidad este miércoles, la ex presidenta no asistirá y seguirá la audiencia de manera remota, junto a su abogado, Carlos Beraldi. En su lugar, fuera de la sede judicial de Comodoro Py, se realizará una clase pública sobre lawfare , la utilización de la justicia con multas políticas, que contará con la participación de académicos, políticos y activistas.
El juicio en cuestión, relacionado con la construcción de rutas en Santa Cruz, ha sido objeto de controversia desde sus inicios. La Cámara de Casación, compuesta por jueces cuyo vínculo con el expresidente Mauricio Macri fue previamente cuestionado, ha generado desconfianza en la defensa de Cristina Kirchner. Sin embargo, el caso ha cobrado relevancia más allá de la causa en sí, convirtiéndose en un símbolo de lo que algunos perciben como un ajuste judicial . Este lunes, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, calificó la causa como un “caso de derecho ficción” y acusó a la justicia de perseguir políticamente a la ex mandataria.
El gobernador, quien ha mantenido una relación cercana con CFK, rechazó las acusaciones señalando que no hay pruebas de que la ex presidenta haya intervenido en la adjudicación de obras viales. Según Kicillof, la responsabilidad recaía en la administración provincial y el Congreso Nacional, no en el Ejecutivo Nacional. “Este proceso es un escándalo jurídico que busca disciplinar a la oposición”, afirmó.
En línea con estas declaraciones, el ministro de Justicia de la provincia, Juan Martín Mena, calificó la causa Vialidad como una “mezcla ilegítima” de intereses mediáticos, políticos y judiciales que buscan poner en jaque la democracia. Además, en la reunión del PJ, que se llevará a cabo en la sede de Smata bajo la conducción de Ricardo Pignanelli, se consolidará el apoyo institucional a Cristina Kirchner.
El camino hacia la Corte Suprema
El fallo de la Cámara de Casación, aunque esperado con gran expectación, no implicaría una condena inmediata para la ex presidenta. Tanto su abogado como voceros judiciales aseguraron que CFK apelará ante la Corte Suprema, un proceso que podría tomar varios años. Dado que el tribunal supremo no tiene plazos definidos, los tiempos son inciertos. El caso recuerda a otros procedimientos prolongados en la Corte, como los casos de Nahir Galarza y la disputa previsional de 2018. Sin embargo, la defensa se muestra confiada en que el máximo tribunal podría revertir la condena, tal como ocurrió en el caso del expresidente. brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Protestas y apoyo público en las puertas de Comodoro Py
En un gesto de unidad, fuera de Comodoro Py, se realizará una clase pública en la que se abordarán las implicaciones del lawfare , un fenómeno que, según los organizadores, no es exclusivo de Argentina. La clase contará con la participación de la periodista y política brasileña Manuela Dávila, así como la decana de Derecho de la Universidad Nacional de Avellaneda, Anabella Luccardi. La clase, titulada “CFK, el poder real y la mafia judicial. Un caso de estudio de lawfare” , busca evidenciar cómo el uso de la persecución judicial se ha extendido a otros países de América Latina y más allá.
El apoyo de la comunidad política y social sigue siendo un pilar para Cristina Kirchner, quien se enfrenta a lo que muchos consideran un proceso judicial motivado por razones políticas. Mientras tanto, las irregularidades de los jueces de la Cámara de Casación continúan siendo tema de discusión, especialmente después de que se conociera que varios de los magistrados mantuvieron vínculos cercanos con figuras del gobierno de Mauricio Macri, lo que llevó a la recusación de los mismos. .
A medida que avanza este complejo proceso judicial, las miradas se centran en la respuesta de la Corte Suprema, que podría ser determinante para el futuro político de Cristina Fernández de Kirchner y para el panorama judicial del país.